martes, 28 de julio de 2020

El otro (parte 2)

Después del autorretrato y el retrato teledirigido de la semana pasada tomé en cuenta lo remarcado por mis docentes, específicamente una cosa. Sacar (y subir) muchas fotos.

 Con el retrato de la vez anterior había tratado de recrear al sujeto en una situación cotidiana de él, pero el resultado acabó siendo una imagen que parecía "robada", es decir una foto con un sujeto desprevenido, y no posando.
 Por lo tanto en esta ocasión me puse muy pedante con mi sujeto, pidendo que prenda y apague luces, pidiendo que busque utilería por toda su habitación y cambiando sutilmente su pose a través de indicaciones. Al final terminaron quedando éstas imágenes con una puesta donde la única luz (además del monitor) proviene de una ventana con persianas dejando entrar una luz de una tarde soleada de verano, la cual está ligeramente atenuada en post.





Y la planta de luces correspondiente


Con el autorretrato me vi inclinado a los trabajos de Dijkstra, principalmente su modalidad de progreso de mostrar la pérdida de la inocencia adolescente y la evolución del sujeto a través de una pose y expresión neutra. Con esa idea volví a usar la puesta de luces de la vez anterior, iluminándome con la luz del monitor y usando mi CPU como trípode, y traté de simular esa evolución a través del tiempo mostrando una transición de la estabilidad a la inestabilidad a través del cambio de vestuario y peinado y a través de la disminución de la luz, lograda cambiando la imagen proyectada desde el monitor.

 f4.8-1/2s-ISO 800-100mm
  f4.8-1/2s-ISO 800-100mm
  f4.8-1/2s-ISO 800-100mm
  f4.8-1/1.3s-ISO 800-100mm
  f4.8-1s-ISO 800-100mm
 f4.8-1/1.3s-ISO 800-100mm

Y la planta de luces correspondiente


lunes, 20 de julio de 2020

El otro (parte 1)

Habiendo terminado la etapa de "la cosa" se nos introdujo al siguiente paso en esta cursada, la etapa de "el otro". Como primer paso en esta nueva etapa se nos pidió la simple tarea de tomar un retrato de una persona en nuestro hogar. Sin embargo en mi caso particular me encuentro solo en mi casa, y en este contexto salir al encuentro con otra persona conlleva un riesgo, por lo cual mis profesores adaptaron este trabajo en dos tareas: tomar un autorretrato, no confundir con una selfie, y tomar un retrato teledirigido, es decir tomar una captura de pantalla de un sujeto a través de una videollamada.

Con el autorretrato quería que definitivamente no fuera una selfie, que no fuera una fotografía de mi mismo sin nada más que decir y, llevándolo más lejos, que no pareciera que soy yo mismo tomándome la foto. Con eso establecido, decidí volver a la situación lumínica tan favorecida por mí mismo, utilizando la luz tenue del monitor, en una situación no favorable; con una remera sucia, una barba desaliñada y un pelo desordenado. 



Con el retrato teledirigido quería ir más allá de usar a mis familiares como personajes, ya que la virtualidad permite expandir los límites geográficos, por lo que decidí usar como sujeto a un streamer en el estado de Washington. Ya conseguido el retratado decidí capturarlo recreando situaciones comunes en su vida de streamer, concentrado en su videojuego y siendo interrumpido por cuestiones en la vida real o IRL




lunes, 13 de julio de 2020

Entrega final: La cosa

Bien, puedo decir que este fue un recorrido bastante complicado, pero debo decir que esa complicación fue culpa mía más que de cualquier otro. Me han dicho mis profesores que contaba con un buen ojo para la luz y que contaba con un objeto con mucho potencial, pero por mucho tiempo no sabía muy bien cómo combinar ambos en una gran foto.

El objeto original, como se apreciará en entradas anteriores, se trata de un gamepad de PC, el cuál ha sido dañado por acciones propias durante esta cuarentena. Traté de aprovechar ese daño para mostrar las entrañas de ese control, un interior que no muchos han visto o se atreven a ver. Algunos lo pensarían como una analogía de la introspección de uno mismo durante estos tiempos, conociendo su propio interior aunque sea como una distracción del mundo.

Ya contaba con muchas dificultades técnicas, ya que suelo capturar imágenes en habitaciones oscuras con una lente no muy luminosa, a eso se le sumó la complicación de querer capturar un objeto muy de cerca lo cual, debido a cómo funciona mi lente, se traducía a un diafragma cerrado, además que la carencia de un trípode significaba que no podía bajar la velocidad de obturación sin que el movimiento de mi mano afectara la imagen. Un último problema fue encontrar una posición en la que pudiera tomar la fotografía sin interponerme entre el objeto y la fuente de luz, lo cual significó contorsionar mi cuerpo en posiciones raras y guiarme a través de la pantalla de la cámara más que por el visor.


Con todo eso dicho, aquí una selección de mis intentos de captura





Y aquí la imagen elegida cómo la entrega oficial